Cien años después, la Virgen de Nuestra Señora de La Esperanza volvió a faltar a su cita con las calles de La Esperanza. En 1920 fue por la llamada “gripe española” y este domingo la pandemia de la Covid-19 volvió a dejar huérfanos de procesión a los esperanceros y esperanceras. Sin embargo, el primer domingo de agosto volvió a contar con actos propios que hicieron rememorar la popular romería, cancelada este año debido a la pandemia. A las 11:00 horas tuvo lugar el acto de reconocimiento a los guayeros y cabreros del Municipio que participan habitualmente en el paseo romero. Más de una decena de ganaderos fueron homenajeados por una “vida abnegada”, tal y como destacó el alcalde de El Rosario, Escolástico Gil.
A las 12:00 horas, tuvo lugar la misa institucional con la presencia del primer edil rosariero, Escolástico Gil, y la presidenta de la Federación Canaria de Municipios (Fecam) y alcaldesa de Candelaria, María Concepción Brito, acompañados por el resto de la Corporación y por el segundo teniente de alcaldesa de la Villa Mariana, José Francisco Pinto. Una homilía sentida, en la que también participaron la Romera y el Romero Mayor de 2019, Carla Nerea Hernández y Ehedey Bacallado, con una ofrenda a la Virgen, y que contó con las notas musicales de Miriam Cruz, solista esperancera y pregonera de la pasada edición de la fiesta, y de la ACM “Princesa Yaiza”. Con tres salvas y los vivas a la Virgen de La Esperanza finalizó esta edición de la fiesta con la confianza en recuperar todo su esplendor en 2021.