Más de treinta particulares y cuatro comunidades de propietarios han sido beneficiarios del "Programa para combatir la despoblación del medio rural" del Plan de Vivienda de Canarias 2020-2025.
El Ayuntamiento de El Rosario ha concedido ayudas para la rehabilitación de vivienda por valor de 408.384’58 euros a más de una treintena de particulares y a cuatro comunidades de propietarios. Estas subvenciones provienen de la partida concedida al municipio de El Rosario dentro del "Programa para combatir la despoblación del medio rural" del Plan de Vivienda de Canarias 2020-2025 del Gobierno de Canarias, a través del Instituto Canario de la Vivienda (Icavi).
Los titulares de viviendas particulares y los administradores de las comunidades de propietarios beneficiarias, publicados en el tablón de anuncios municipal, disponen ahora de diez días hábiles para presentar la aceptación de la ayuda concedida, de un máximo de 10.000 euros por vivienda para obras de rehabilitación, reforma de zonas comunes de edificios y mejora de la eficiencia energética y cuyo plazo para su ejecución será de un máximo de seis meses.
El alcalde de El Rosario, Escolástico Gil, subraya que la creación de esta línea de ayudas “fue fruto del trabajo realizado entre la Fecam y el Icavi con el objetivo de hacer frente a la despoblación de las zonas rurales y ayudar a que sus habitantes puedan permanecer en sus entornos de vida habituales, facilitando que sus viviendas sean dignas y estén en perfectas condiciones de habitabilidad y accesibilidad”.
De esta forma, este programa tiene como objetivo fijar población en el medio rural mediante varias acciones en materia de vivienda, entre las cuales se encuentra la rehabilitación o adecuación de viviendas de titularidad privada del entorno rural a las condiciones mínimas de habitabilidad, ahorro de consumo energético, elementos estructurales y, en definitiva, aquellas obras necesarias para el adecuado mantenimiento de las mismas, que también contribuiría a propiciar la permanencia o el cambio de residencia a las zonas rurales.
Según se estableció en las bases de la convocatoria, la vivienda debe constituir el domicilio habitual y permanente de sus propietarios o arrendatarios en el momento de la solicitud de la subvención. Excepcionalmente, la vivienda a rehabilitar podrá estar deshabitada a fecha de la solicitud, pero se deberá aportar el compromiso de la persona titular de la vivienda a destinarla a domicilio habitual y permanente de la persona propietaria o de un tercero en régimen de arrendamiento en el plazo de dos meses contados a partir de la finalización de las obras. En el supuesto de que se solicitase la subvención para realizar actuaciones de accesibilidad, alguno de los miembros de la unidad de convivencia deberá tener reconocida una discapacidad o ser mayor de 65 años.
A través de esta línea de ayudas se podrán rehabilitar viviendas de una antigüedad mínima de veinte años, salvo aquellas en las que vivan personas mayores de 65 años o con diversidad funcional. Se pretende incentivar obras para mejorar las condiciones de habitabilidad, de ahorro de consumo energético, elementos estructurales y, en definitiva, facilitar todas aquellas obras necesarias para el adecuado mantenimiento de las mismas.