El Ayuntamiento de El Rosario se sumó hoy, miércoles, a la conmemoración del Día Internacional contra la Homofobia, la Transfobia y la Bifobia ondeando, por primera vez en su historia, la bandera arcoíris frente al edificio del Consistorio. El alcalde de El Rosario, Escolástico Gil, presidió una concentración frente al ayuntamiento por la tolerancia y la defensa de la libertad, la igualdad y el respeto de toda orientación sexual. Durante el acto, en el que también participó el colectivo Algarabía, la concejala del área de Acción Social e Igualdad, María de los Ángeles Rodríguez, leyó un manifiesto para reivindicar la igualdad y la eliminación de cualquier tipo de discriminación a las personas por su orientación sexual o por su identidad de género.
MANIFIESTO:
«Hoy, 17 de mayo, celebramos el día Internacional contra la homofobia, transfobia y bifobia para conmemorar la eliminación de la homosexualidad de la lista de enfermedades mentales por parte de la Asamblea General de la Organización Mundial de la Salud. Lo que tuvo lugar el 17 de mayo de 1990. El objetivo principal de celebrar este día es el de crear conciencia sobre todo tipo de acciones que sirvan para denunciar la discriminación de que son objeto las personas homosexuales, lesbianas, bisexuales, transexuales y hacer que avancen sus derechos en todo el mundo.
Desgraciadamente muchas personas sufren estas fobias por el desconocimiento y falta de información de la ciudadanía y de la autoridad que debe diseñar políticas en pro de una cultura que acepte la diversidad de personas que existen en nuestras sociedades. Por falsas creencias fundadas, principalmente, en concepciones religiosas, miedo a lo que nos parece diferente y que no comprendemos y por tener un sentido de superioridad frente a otros y otras. A consecuencia de lo anterior, se genera la fobia hacia las personas homosexuales, transgéneros y transexuales, manifestándose en la discriminación hacia estas personas. Negación de los derechos fundamentales a todos y a todas por igual y dando lugar a sociedades intolerantes, ya que dicha fobia se reproduce de generación en generación. Es hora de que cambiemos la idea egocéntrica de que existe una preferencia sexual que es moral y éticamente aceptada.
No podemos olvidar la situación en nuestro país, mostrando nuestra preocupación por el elevado número de agresiones que siguen aumentando año tras año hacia estas personas. Además, aún hoy son demasiado pocas las víctimas que denuncian, a pesar de que los datos oficiales señalan que cerca del 40% de los delitos de odio que se producen en nuestro país son motivados por la orientación sexual e identidad de género.
Es hora de que aceptemos la realidad que ha existido siempre y que se construya una sociedad más sana, más tolerante y menos ignorante frente a lo que le es diferente, porque en virtud de esa ignorancia se ha violentado y se continúa vulnerando los derecho humanos básicos de las personas.
Como dijo en un momento determinado el luchador por la libertad de amar, porque al final, de eso es de lo que se trata, nuestro desaparecido compañero y lagunero, Pedro Zerolo: “Quiero decirles que los homosexuales no somos orientaciones sexuales que vagamos por el espacio: somos sus hijos e hijas, sus hermanos y hermanas, sus compañeros y compañeras de trabajo, sus compañeros y compañeras de partido, sus amigos y amigas, etc etc
Es fundamental que creemos conciencia y que el discurso de los derechos humanos sea aplicado a todos y a todas sin distinción de ningún tipo. Basta de la doble moral. No a la transfobia, homofobia y bifobia.»
La dignidad no se olvida
como no se olvida el respiro
el amor
el país
las canciones
los poemas
los cerros
el mar.
La dignidad no se olvida
se levanta
y no importa cómo:
con piedras cruzando el cielo
con trapos pintados de rojo
con poesía estremecida
en el pasaje de la pobla:
la dignidad es mía
es tuya, nuestra
hasta el fin de los tiempos
y nadie ha nacido aquí
con el derecho a quitarla.
Absalón Opazo
Del libro Periferia (2005)