Polvos de talco, la negra Tomasa y el gran Luis Morera. La Gala de elección de la Romera y el Romero Mayor de La Esperanza 2019 tuvo 100% sabor palmero. En una velada que pasará a la historia de la Villa por ser la primera en la que se eligió también a un Romero Mayor, en consonancia con la igualdad que se propone ir implantando en este tipo de certámenes, el protagonismo estuvo compartido entre Carla Nerea Hernández Alonso, elegida Romera Mayor, y Ehedey Bacallado Negrín, quien se convirtió en el primer Romero Mayor de La Esperanza.
El acalde de El Rosario, Escolástico Gil, fue el encargado de imponer las bandas honoríficas a ambos ganadores, en el caso de la Romera Mayor acompañado por la Romera saliente, Nerea Pita Martín. Por su parte, la primera teniente de alcalde y concejala de Igualdad, Sara Cabello, y el edil de Fiestas, Yeray Gutiérrez, hicieron lo propio con las bandas de damas de honor y romeros a todos los participantes.
Momentos destacados hubo muchos. En el plano sentimental, el tributo que se le rindió a José Manuel Díaz Martín “Memelo”, anterior presidente de la Comisión de Fiestas fallecido recientemente, fue, sin duda, uno de ellos. Pero, hubo más, por la plaza del Adelantado desfilaron varios indianos repartiendo billetes y polvos de talco, la negra Tomasa fue la reina de la fiesta en el escenario y la guinda musical la pusieron el grupo folclórico “Isleñas” y la inconfundible voz de otro palmero universal, Luis Morera. La Gala estuvo dirigida por el reconocido escenógrafo Miguel Ángel Hernández, presentada por Gilberto Isande y contó con el atrezzo, obra de Víctor Jorge Alonso.