Esta campaña ayudó a que mujeres víctimas de violencia machista pudieran comunicar su situación durante el confinamiento.
El Ayuntamiento de El Rosario, a través de las Concejalías de Igualdad y de Sanidad, que dirigen la primera teniente de alcalde, Sara Cabello, y la edil Fátima Gutiérrez respectivamente, mantuvieron, recientemente, un encuentro virtual con el presidente del Colegio Oficial de Farmacia de Santa Cruz de Tenerife, Manuel Ángel Galván, y con las titulares de las cinco farmacias del Municipio, para realizar un balance sobre el recurso «Mascarilla-19» en El Rosario. Esta iniciativa, puesta en marcha por el Instituto Canario de Igualdad al comienzo del confinamiento, buscaba dar respuesta a mujeres víctimas de violencia machista que, debido al Estado de Alarma, convivían con sus maltratadores y no podían hacer uso de los recursos habituales para comunicar su situación. De esta forma, la víctima solo tenía que acudir a una farmacia y pedir una «Mascarilla-19» y el personal ya sabía de qué se trataría y cómo proceder.
La responsable de Igualdad, Sara Cabello, destaca que «se trataron diferentes temas para identificar y saber cómo se debe reaccionar ante un caso de violencia de género». Además, subraya que esta campaña, que ha sido exportada con éxito a otras Comunidades Autónomas e, incluso, a otros países, «ha ayudado a la sensibilización contra la violencia machista y a que la sociedad, en su conjunto, perciba la violencia ejercida contra las mujeres como un problema público que se da en cualquier estrato social».
Por su parte, la edil de Sanidad, Fátima Gutiérrez, recuerda que «el Gobierno de Canarias y los colegios oficiales de Farmacia han firmado un protocolo de actuación conjunta que permitirá consolidar este recurso al servicio de las mujeres y menores víctimas de violencia de género en Canarias».
Durante el encuentro se hizo balance de esta iniciativa en Canarias, donde 45 mujeres fueron atendidas (23 en Tenerife y 22 en Gran Canaria). Por último, desde el área de Igualdad se pondrá en marcha la formación del personal farmacéutico en materia de violencia de género y se propondrá la organización de reuniones de coordinación para la detección de casos y la creación de protocolos de actuación.