El proyecto forma parte de la Estrategia Canaria de Transición Igualitaria y pretende contribuir al desarrollo de un contexto escolar que promueva la igualdad y el respeto a la diversidad.
Las dos escuelas municipales de El Rosario, la de La Esperanza y la de Radazul, incluirán en su programación el proyecto «Bicácaro», un programa enmarcado dentro de la Estrategia Canaria de Transición Igualitaria (ECTI) del Gobierno de Canarias, que tiene como objetivo contribuir al desarrollo de un contexto escolar libre de violencias, impulsando una mirada coeducativa de respeto a la diversidad por orientación sexual e identidad de género.
Para la responsable del área de Igualdad del Consistorio rosariero, la primera teniente de alcalde Sara Cabello, «es muy importante que, desde la más tierna infancia, la igualdad y el respeto a las diferencias sean materias comunes para nuestras niñas y niños con el objetivo de lograr que, en el futuro, se conviertan en mujeres y hombres libres de prejuicios y respetuosos con quien es diferente por cualquier motivo».
Por ello, el Ayuntamiento de El Rosario, a través de la Concejalía de Acción Social de la que dependen ambas escuelas y que dirige la edil Fátima Gutiérrez, se ha adherido ha dicho programa para «colaborar en la adopción de políticas y procedimientos que permitan incorporar la igualdad y la diversidad en la organización de nuestras escuelas y prestar una atención especial al desarrollo equilibrado durante los primeros años de existencia de nuestras niñas y niños», señala la edil.
A través de material didáctico específico acorde a las edades del alumnado, el proyecto «Bicácaro» busca procurar una respuesta ajustada a sus necesidades fisiológicas, psicológicas, intelectuales y de socialización. Asimismo, la intervención educativa partirá del respeto a las diferencias y de una atención personalizada.
En cuanto al ámbito curricular-pedagógico, se asesorará en inclusión de perspectiva de género, atención a las realidades diversas y para la inclusión de educación afectivo-sexual. Además, a las profesionales de ambas escuelas se les ofrecerá formación, al igual que a las familias, que además recibirán asesoramiento en la sensibilización y podrán asistir a jornadas de intercambio de experiencias y buenas prácticas.